jueves, 29 de diciembre de 2022

La Neurociencia en la mercadotecnia y la política.

 

César Monroy-Fonseca, Claudio Nassar. Neurociencia: La Súper Carretera De La Toma De Decisiones.  SEELE Neuroscience S.C, 2016, Edición Electrónica.

 Leía a Antonio Damasio, sobre emociones, sentimientos, esa larga historia evolutiva de la primera forma de vida hasta lo que hoy somos  y de pronto, alguna cita me llevó a buscar a un autor (que no era éste) y terminé con este libro, que por el título, eso de la  supercarretera me llamó la atención, entendiendo esto, como caminos neurales que desatan emociones y acciones ipso facto. 

Pues prometía explicarme por qué tomamos los caminos por los caminamos. Lo leí, no me agradó que no tuviese bibliografía como todos los libros, sus autores fueron nombrados en el texto mismo, en la redacción de sus ideas, tampoco vi esa separación puntual que hace Antonio Damasio entre emoción y sentimientos (aunque confieso que es algo que sigue confundiéndome, pero me parece una distinción necesaria), sin embargo, interesada por ver como explicaba nuestra capacidad de decidir, lo terminé.

El libro describe, nuestros sistema nervioso, lo divide en parte 1 y 2. El sistema 1, no explica que tiene que ver con lo emocional muy vinculado a los sentidos y esa necesidad de sobrevivencia que no se piensa; la parte 2, no se trata de ese proceder automático, sino la implicación de nuestra subjetividad con relación al contexto y nosotros mismos.

En el avance, me agradó que dijera que era un error pensar que cerebro y sujeto están separados, me dio la impresión que defendía nuestra capacidad de subjetiva en la toma de decisiones, pero en la medida en que se avanza, esa  mención se extravía y con los  experimentos que sugiere, va concluyendo que nuestros sistemas 1 y 2, pueden ser objeto de manipulación por adecuadas estrategias de mercadotecnia con fundamentos en los avances del funcionamiento de nuestro cerebro.  Conocimiento que igual sirve al mundo del marketing político.

Y sí, fue explicando esas técnicas de manipulación de la subjetividad, y terminé algo desanimada.  Finalmente, nuestra toma de decisiones es una supercarretera en manos de quienes desean algo de nosotros.  Se construyen experimentos, estrategias y poco a poco somos llevados al punto de decisión que interesa a cierto poder o finalidad. Me impresionó cómo se utiliza este conocimiento en las campañas políticas.  

Ha sido interesante conocer este funcionamiento y manejo de nuestra subjetividad, pero quiero pensar en esa idea que leí, que no puede pensarse al ser humano  sólo desde el funcionamiento de su cerebro, que sin bien somos eso, respondemos emocionalmente por el mal gobierno que tenemos de ellas, también esas respuestas que no se piensan son parte de esa oscuridad que somos, que también se activan esos resortes desconocidos de nuestra subjetividad don van deseos, recuerdos, sentimientos, y que nuestra respuesta es humana, demasiado humana, por lo tanto, no es tan previsible.  Nuestra respuestas pueden sorprender al más confiado debido a nuestra demasía de sentido, esta capacidad de lenguajes, de idear, rompe toda prescripción decretada sobre nuestro modo de ser y actuar.

Tal vez estoy pensando como educadora, no como mercadóloga, y que desde este terreno, somos capaces de formar a personas capaces de trabajarse a sí mismas, de gobernar sus emociones  y sentimientos, de pensar en las consecuencias de sus acciones, en forjarse como personas fuertes, bien situadas, responsable y atenta a estas formas de manipulación.

El asunto, es que nuestros educación está algo extraviada, nosotros también y pues somos terreno fértil para todo tipo de campañas que pretenden atraparnos desde nuestras subjetividad.

Es un libro para personas que se dedican a la mercadotecnia, al diseño de campañas políticas;  y a mí me interesó como formadora de maestros, quería saber más sobre cómo impulsar supercarreteras autoformativas... entiendo que no pasa por ahí, la formación es un trabajo que nace desde el deseo de cada quien, y que la tarea es favorecer ese deseo. Autoformarse es una decisión personal, pues es quien tendrá que desmontar en sí mismos ideas, prejuicios, sentidos y reconstruirse, y la verdad, no es fácil.

Bueno, cuando menos me he dado cuenta, en que se está empleando todo este nuevo conocimiento de las neurociencias... yo seguiré con Damasio.


No hay comentarios:

Publicar un comentario